Un error común que he visto que cometen muchos fundadores es sobreestimar dramáticamente las probabilidades de que un gran inversor multinivel de capital riesgo haga un puente con una empresa. Una de las razones por las que suelo oír que los fundadores priorizan a una gran firma de capital riesgo para liderar su ronda semilla es la expectativa de que tendrán el beneficio de los grandes recursos de la firma para las rondas posteriores, especialmente si necesitan financiación puente. Existe la suposición ingenua de que, pase lo que pase, el gran capital riesgo emitirá otro cheque si es necesario. En realidad, las grandes firmas de capital riesgo suelen ser las más implacables a la hora de deducir a las empresas con bajo rendimiento de la cartera, especialmente aquellas que emitieron un cheque semilla, un porcentaje muy pequeño del fondo total. Si una empresa está rindiendo por debajo del esperado, es poco probable que un insider de varias etapas intervenga para rescatarla, especialmente si nadie más está dispuesto a invertir. No son un cajero automático gratuito para usar cuando un fundador lo necesite. No todas las grandes firmas de capital riesgo se comportan así, pero la mayoría sí. Y es totalmente racional. Su enfoque y capital irán para los pocos que superen el rendimiento que puedan devolver fondos de 1.000 millones de dólares.