Durante la Gran Depresión, las cebollas eran un vegetal común, fácil de cultivar y almacenar. Por lo tanto, estaban fácilmente disponibles y, lo más importante, eran gratis. Mientras tanto, la mantequilla de maní también era económica. Así que, la Oficina de Economía Doméstica ideó la receta de cebollas rellenas de mantequilla de maní como una forma sencilla para que las amas de casa estadounidenses alimentaran a sus familias. La receta de este curioso plato fue publicada en muchos periódicos y revistas de la década de 1930. Eventualmente, encontró su camino en las mesas de comedor estadounidenses como una comida saludable, sabrosa, simple y de bajo costo que se podía servir en cualquier momento del día. El revoltijo consistía en cebollas al horno con un relleno de mantequilla de maní mezclado con migas de pan rancio. Estos ingredientes se unieron y crearon un plato desagradable y poco apreciado que la gente solo comía para llenar sus estómagos hambrientos. Alimentos extraños de la Gran Depresión: