Los especialistas en marketing son una mentira. No hay verdaderas “especialidades” sin ser primero un generalista. Y esta industria creó esa confusión por dos razones simples: 1. La mayoría de los equipos son startups. Usas diferentes sombreros cada semana. Casi nadie tiene un departamento de marketing de 20 personas para separar roles de manera ordenada. 2. La mayoría de los marketers aquí son autodidactas. Aprendieron fragmentos del oficio, no la disciplina completa, por lo que confunden una herramienta con una especialidad. El SEO no es marketing. Las redes sociales no son marketing. El contenido no es marketing. Esos son canales. Si no puedes entender a los usuarios, crear narrativas, leer datos y convertirlos en estrategia, no eres un marketer. Eres un especialista para realizar una tarea y aún necesitas un marketer cerca para unirlo todo. Esto no es una crítica para quienes hacen esto, es simplemente cómo funciona. Para convertirte en un “especialista”, ya debes ser un generalista. La base viene primero, y siempre es la misma. Las herramientas vienen después. Un marketer con una base sólida puede aprender cualquier área específica rápidamente porque los mecanismos subyacentes nunca cambian. Así que cuando las empresas dicen que quieren un especialista, lo que realmente necesitan es un "generalista" fuerte, es decir, un marketer de pila completa, que ya tenga experiencia en esa tarea específica. No confundas conocer una pequeña parte del embudo de marketing con ser un especialista.