Cada día, el mundo genera más de 400 millones de terabytes de datos. Esos datos alimentan los pipelines de entrenamiento de IA. El valor se crea en la parte superior. La atribución suele romperse en la parte inferior. La próxima fase de la IA no se trata solo de la escala del modelo. Se trata de la procedencia, la trazabilidad y la aplicación. Por eso construimos DataNet. Una capa de memoria compartida donde los datos llevan linaje, la atribución es verificable y los contribuyentes pueden ser recompensados programáticamente.