MICHAEL BURRY ACABA DE MARCHARSE DE WALL STREET No porque estuviera equivocado. Porque tener razón ya no importa. Su última carta para inversores contenía una frase que debería aterrorizar a todos los gestores de fondos, banqueros centrales y responsables políticos del mundo: "Mi estimación del valor de los valores no está ahora, ni lo ha estado desde hace tiempo, en sintonía con los mercados." Esto no es una predicción de crash. Esto es un certificado de defunción. LOS NÚMEROS QUE NADIE TE DIRÁ Los fondos indexados pasivos controlan ahora el 52% de todos los activos de fondos estadounidenses. Quince coma cuatro billones de dólares. BlackRock, Vanguard y State Street gestionan en conjunto veinticinco billones. Poseen participaciones dominantes en prácticamente todas las empresas públicas de Estados Unidos. No analizan nada. Cada dólar que fluye hacia un ETF del S&P 500 asigna automáticamente treinta y cinco centavos a siete acciones. No porque alguien estudiara los balances. Porque ese es su peso índice. El algoritmo no puede leer un informe de resultados. El algoritmo no puede procesar la sobrevaloración. El algoritmo simplemente replica. LA ESPIRAL DE LA MUERTE La compra pasiva aumenta los precios. Precios más altos aumentan los pesos del índice. Pesos más altos atraen más compras pasivas. El bucle de retroalimentación funciona completamente independiente de si algún negocio vale lo que el mercado afirma. El comprador marginal de acciones estadounidenses ya no es un analista con convicción. Es un fondo de fecha objetivo que recibe su asignación quincenal de nómina. ...