Esto es INCREÍBLE. Tesla acaba de mostrar a Optimus en marcha. No los movimientos rígidos y preprogramados que hemos visto antes, sino correr de verdad con piernas coordinadas y patrones de zancadas reales. Correr es fundamentalmente más difícil que caminar porque el robot pierde contacto con el suelo y tiene que resolver el equilibrio en el aire mientras controla la energía que emite. Si se sienten cómodos mostrando esto públicamente, su control motor y entrenamiento en IA han mejorado significativamente. Esto importa porque un humanoide capaz de correr y moverse por entornos dinámicos ya no está confinado a las plantas. Hablamos del verdadero potencial de despliegue en almacenes, obras y trabajos de servicio, lugares diseñados para cuerpos humanos. Es entonces cuando la economía de unidades y el potencial de escalado realmente se vuelven viables. Tesla es el único jugador que puede ganar aquí. Poseen la pila vertical, la IA propietaria, los datos de sensores de millones de vehículos que se realimentan en el entrenamiento, sus propios chips y la fabricación que realmente escalan. Boston Dynamics y Figure AI pueden tener mejores algoritmos sobre el papel, pero no tienen volante ni la capacidad de producir miles de unidades de forma rentable. Tesla ya ha construido la cadena de suministro para la complejidad y la producción en masa. La mayoría del mercado sigue viendo a Optimus como material para la feria de ciencias de 2030, pero si ahora están demostrando robots en funcionamiento de forma casual y pueden resolver el problema de costes, eso es un negocio de cientos de miles de millones de dólares oculto a simple vista. La verdadera apuesta es si Tesla puede realmente ejecutar la producción y el coste, lo cual, dado su historial con los vehículos eléctricos, es más plausible de lo que la gente piensa.