Fíjate cómo los demócratas y los medios principales están molestos con quienes exponen el fraude, en lugar de con quienes lo cometen. ¿Por qué? Porque son cómplices. Están robando nuestros impuestos y dándolos a ilegales, como parte de un plan más amplio para robar elecciones. Así de sencillo.