Para que yo sea gay no requiere nada de ti. No necesito que me digas todos los días que soy gay. No necesito tomar medicación para seguir siendo gay. No necesito que otras personas me refiran a mí con un lenguaje prescrito. No necesito cirugía ni acceso a espacios concretos. No necesito leyes para reconocer que soy gay. Podría pasar toda mi vida en una habitación sin ventanas completamente solo y ser gay hasta el día que muera. No me digas que ser LGB es algo parecido a ser TQ+, y no obligues a que uno se juegue con el otro. No somos iguales.