Estados Unidos está preocupado por los recientes acontecimientos en el sureste de Yemen. Instamos a la moderación y a la diplomacia continuada, con el objetivo de alcanzar una solución duradera. Estamos agradecidos por el liderazgo diplomático de nuestros socios, el Reino de Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos, y seguimos apoyando todos los esfuerzos para avanzar en nuestros intereses de seguridad compartidos.