las industrias se alinean perfectamente bajo la mirada del Emperador. uno a uno sus tablones se arrodillan, sus beneficios se refunden en armas del Santo Imperio. la resistencia colapsa de la noche a la mañana; La desobediencia no es rentable. Toda producción, toda innovación, toda riqueza cumplen ahora un único propósito. La máquina del hombre se doblega a la voluntad divina. Hágase su voluntad.