Las guerras del streaming han terminado. Netflix ganó. Y lo hicieron comprando el activo más heredado de Hollywood del planeta, justo lo que pasaron una década diciendo que no necesitaban. HBO, Harry Potter, GoT, Batman, toda la bóveda por 72.000 millones de dólares. Sarandos admitió en la llamada que siempre han sido "constructores, no compradores", pero esto era demasiado bueno para dejarlo pasar. Ahora todo se trata de superar a los reguladores. Esa cuota de ruptura de 5.800 millones de dólares te dice que ni siquiera ellos están seguros de poder cerrarla.