La brecha de confianza en la IA no se trata solo de inteligencia, sino de verificabilidad. Si no podemos demostrar quién contribuyó con los datos, qué modelo se invocó o qué ejecución tuvo lugar, el sistema sigue siendo una caja negra. El poder notarial de OpenLedger otorga a cada contribución una firma, a cada actualización de modelo una rastro y a cada inferencia una ruta de recompensa. Cuando el oleoducto es verificable, la economía finalmente tiene sentido