Avivar el miedo. Explota la desesperación. Suspender el estado de derecho. Brutalidad de los fanáticos. Cada vez que los más fuertes brutalizan a los débiles, es fundamentalmente el mismo libro de jugadas. Nuestro deber es hacer frente a la brutalidad. Nuestra obligación moral es proteger a los vulnerables y responsabilizar a los poderosos.