Nuestro instituto estaba al lado de una fábrica de comida para perros La mayoría de los días respirábamos el olor de animales que murían por otros animales y pensaba que nuestros pulmones ya no tendrían hambre de aire Pero la mayor parte del tiempo seguimos respirando y pensó en que no éramos muy diferentes que la fábrica y su producción o el escape o los animales alimentando a otros animales