"Everybodyismo." La humanidad debe soltar su agarre femenino y emocionalmente incontinente de la idea de que cada ser humano merece recursos y compasión. Toda relación es en realidad una transacción económica. Esto no es una afirmación de "debería", es una afirmación de "es". Cada ser humano utiliza su cuerpo para hacer cambios en el entorno. Algunos de estos cambios generan más valor que otros, y algunos de estos cambios consumen más valor que otros. El control del valor es lo que llamamos "propiedad". Cuanto más voluntario e informado sea ese intercambio de propiedad, más ascenderá la Humanidad. Cuanto más obligatorio sea ese intercambio de propiedad, más degradará la humanidad en gordos, horribles y violentos retrasados. En otras palabras, cuando tomas mi dinero y se lo das a alguien a quien no valoro, no me ayudas ni ayudas a la humanidad. Estás haciendo que toda la humanidad pague por tu incontinencia emocional. Tenemos que dejar que los humanos de baja calidad se adentren en la oscuridad.