Internet antes de HTTPS era una máquina de vigilancia. Contraseñas y pagos expuestos. Cualquiera en tu cadena podría verlo todo. Lo solucionamos con cifrado invisible. Ya nadie piensa en HTTPS, simplemente funciona.
La blockchain hoy es donde estaba internet en 1995: funcional, pero fundamentalmente expuesta. Cada saldo de monedero es público, cada transacción rastreable, cada relación financiera visible, de forma permanente, por diseño. Esto es vigilancia arquitectónica.
7.15K