Analizando esto un poco más, nunca hemos visto ninguna evidencia de que el votante rural de clase trabajadora que se apoyó en Trump en 2016 superara en votos sus puntuaciones de participación en 2016/20 o se quedara por detrás en sus resultados en las elecciones de mitad de mandato. Lo que sí se obtiene es cierta división de candidaturas, pero eso es diferente a no votar.

Esta teoría se refleja en la idea de que los votantes de Trump dejan en blanco las elecciones en las papeletas inferiores, lo cual es demostrablemente falso basándose en el historial de votos emitidos en lugares como Nevada. La división de tickets es el problema mucho mayor.