Cada día, como alcalde, he visto el valor y el compromiso de los hombres y mujeres del NYPD. Gracias a su trabajo y al liderazgo de nuestros actuales y antiguos comisarios de policía, nuestra ciudad está más segura que nunca. • Los tiroteos están en el punto más bajo de nuestra historia. • Nuestros metros son más seguros. • El robo minorista ha bajado un veinte por ciento. Estoy orgulloso de este progreso, y aún más orgulloso de las personas que lo hicieron posible. Mi esperanza es que la próxima administración proteja este impulso y continúe apoyando a los agentes que mantienen Nueva York como la ciudad grande más segura de Estados Unidos.