Mucha gente utiliza los retroacesos de Fibonacci como una "herramienta para predecir el mercado". Pero los traders expertos nunca miran los números, sino la calidad de los retrocesos en la tendencia. La práctica habitual es sencilla: Primero, encuentra una tendencia clara y empuja de un mínimo claro a un máximo claro. Luego observa si el pullback muestra soporte en el rango de claves. El 61,8% no tiene magia en sí mismo, es solo una profundidad de retroceso que suele ocurrir en tendencias fuertes. Lo que realmente es útil es el rendimiento del precio una vez que llega aquí: ¿se puede estabilizar? ¿Existe una estructura de respaldo vertical? ¿Se ha ralentizado significativamente el declive? Si estas señales aparecen al mismo tiempo, significa que la presión vendedora está casi liberada, los alcistas siguen retransmitiendo y la probabilidad de que la tendencia continúe es mayor. Por lo tanto, el enfoque nunca está en "si hay un retroceso al 61,8%", sino en "si existe una estructura de estabilización limpia tras alcanzar el rango de claves".