Perseguir ceros nunca termina. $ 10K quiere $ 100K. $ 100K quiere $ 1 millón. $1M quiere $10M. No ganas el juego sumando dígitos. Lo vences viviendo. La línea de meta siempre se mueve. El tiempo no. Trabaja duro, sí. Pero si no haces tiempo para el amor, ya has perdido.