Aprendí mi oficio en soledad. Solo yo, un archivo de Illustrator sin conexión y 99 malas ideas que nadie vio. Me avergonzaba de mi proceso, pero necesitaba esa tranquilidad para experimentar + fallar de forma segura, antes de compartir los conceptos de diseño con mi jefe. los juniors de hoy están en Figma en vivo con 10 ojos mirando. No hay espacio para ser desordenado o probar esa idea tonta. Eso importa.