De cincuenta sobrevivientes a 35 millones de descendientes: el legado extraordinario del Mayflower El primer Día de Acción de Gracias fue un asunto agridulce. De los 102 pasajeros del Mayflower, solo alrededor de 50 sobrevivieron al primer invierno, con la ayuda de la tribu Wampanoag. Sin embargo, este pequeño grupo de sobrevivientes dio frutos asombrosos. Alrededor de 35 millones de estadounidenses pueden rastrear su ascendencia hasta ese viaje, según la Sociedad del Mayflower. Yo soy uno de ellos, a través de mi abuela paterna. ¿Cómo logró este pequeño grupo crecer tanto? Poniendo a los niños en primer lugar Los números que llegaron a la mesa en el primer Día de Acción de Gracias cuentan una historia que es asombrosamente desgarradora y hermosa. En el primer Día de Acción de Gracias, los colonos eran en su mayoría hombres y niños, porque casi todas las mujeres habían perecido. De 50 hombres adultos en el Mayflower, 22 estaban vivos después de ese primer año brutal. De 18 mujeres adultas, esposas y madres, solo 4 vivieron para celebrar la primera cosecha. Pero de los 30 niños en el Mayflower, 25 vivieron para ver el primer Día de Acción de Gracias, y la mayoría de ellos vivirían largas vidas y tendrían muchos descendientes. ¿Cómo sucedió eso? La respuesta es obvia. Muchos adultos, y casi todas las madres, se sacrificaron voluntariamente para que sus hijos pudieran vivir. Grandes familias, sustentadas por la fe De ese comienzo inauspicioso surgió un crecimiento increíble. Las mujeres en las Colonias de Plymouth promediaban ocho hijos cada una, una de las tasas de fertilidad más altas jamás registradas. Para los peregrinos, tener hijos era un llamado divino. Los escritos de William Bradford, el primer gobernador de la Colonia de Plymouth, muestran que los peregrinos veían su sufrimiento como parte de un plan divino, comparable al de los antiguos israelitas. Esta creencia dio a los colonos la fortaleza para soportar y, en última instancia, prosperar en circunstancias aparentemente imposibles. Esperanza en medio de la crisis Hoy en día, muchas naciones enfrentan el espectro del declive, debido a las bajas tasas de natalidad y más. Algunos hablan como si no hubiera esperanza e imaginan que nunca saldremos de esta mala racha. Esos ancestros peregrinos probablemente no se relacionarían con tal desesperación. Enfrentando probabilidades mucho más largas y con muchos menos apoyos, encontraron una manera de salir adelante, ayudando a forjar la nación más grande conocida a partir de unos pocos sobrevivientes desgastados. Nuestros desafíos actuales parecen pequeños en comparación. ¡Feliz Día de Acción de Gracias!