La esclavitud en el Imperio Otomano duró más de 500 años (hasta el 20% de la población del imperio estaba esclavizada), principalmente esclavizados por europeos, precedió a la esclavitud en América y continuó hasta el siglo XX. Nadie en la Turquía moderna siente la más mínima punzada de culpa por ello. ¿Por qué? Porque hace tiempo que se acabó y todos han seguido adelante.