A veces se dice que los árboles reducen el albedo, supuestamente oscureciendo la superficie de la Tierra y, por lo tanto, absorbiendo más calor. Pero, de hecho, los bosques dan como resultado una mayor formación de nubes en lo alto, lo que aumenta significativamente el albedo y trae la lluvia que tanto se necesita. "... Para las regiones de latitudes medias, el efecto de enfriamiento de las nubes, en combinación con el secuestro de carbono, superó la radiación solar que absorbieron las áreas boscosas. Los modelos mostraron que las nubes se forman con más frecuencia sobre áreas boscosas que sobre pastizales y otras áreas con vegetación corta, y que esta formación mejorada de nubes tuvo un efecto de enfriamiento en la atmósfera de la Tierra. Los investigadores observaron a partir de los datos satelitales que las nubes también tienden a formarse más temprano en la tarde sobre áreas boscosas, lo que resulta en una mayor duración de la cobertura de nubes y más tiempo para que las nubes reflejen la radiación solar lejos de la Tierra".