¿Alguna vez has fantaseado con una "transacción ideal"? Encontrar el punto perfecto, entrar y que el precio despegue de inmediato, aumentar la posición a favor, que la tendencia sea limpia y rápida, sin retrocesos, y al final poder volver a entrar y aprovechar otra parte del movimiento. El problema es que: estas cinco cosas no pueden suceder al mismo tiempo en la realidad. Un punto perfecto generalmente viene acompañado de una gran incertidumbre; Un movimiento que despega de inmediato a menudo ya ha subido un tiempo; Una gran posición requiere una certeza absoluta, pero esa certeza no existe; Un movimiento sin retrocesos es muy raro, pero a menudo hace que la gente salga antes de tiempo; Volver a entrar y aprovechar un movimiento es aún más un lujo, acertar la dirección dos veces seguidas ya es cuestión de suerte. El verdadero trading profesional no busca ser un "guerrero de cinco lados", sino que sabe claramente: Si se cumplen dos de estos puntos, ya es una transacción que vale la pena hacer; si se cumplen tres, ya se puede ganar una fortuna y cambiar el destino.