A menudo comienzo mis charlas señalando que la Era Industrial ha pasado dos décadas de su fecha de caducidad. Lo que quiero decir con esto es que ya estamos profundamente inmersos en un período de transición. Las promesas de conseguir un trabajo y luego poder permitirse una casa y una familia están rotas. Aquí hay algunas publicaciones recientes que he leído sobre este colapso.