El Impuesto a los Millonarios no se trata de millonarios. Se trata de darle al gobierno la capacidad de confiscar la propiedad privada de los ciudadanos. Una vez que crucemos esa línea, lo expandirán a nosotros, tal como lo hicieron con el Impuesto sobre la Renta de 1913. No poseeremos nada. Y no seremos felices.