Ubisoft ha sufrido una violación importante: los hackers exfiltraron terabytes de repositorios de código fuente interno que cubren casi todos los juegos, herramientas, SDKs y servicios desde la década de 1990 hasta los proyectos actuales. El ataque explotó una vulnerabilidad de MongoDB y coincidió con la interrupción de Rainbow Six Siege y la manipulación de la base de datos el 27-28 de diciembre de 2025. No se ha publicado ningún código aún, y Ubisoft no ha confirmado oficialmente el robo del código fuente.