Mientras tanto, Bruce Willis ganó 5 millones de dólares por adelantado por protagonizar la película original Die Hard (1988). Este salario fijo fue innovador en su momento, convirtiéndolo en uno de los actores mejor pagados por una sola película y sorprendiendo a Hollywood. No tuvo regalías significativas ni participación en las ganancias del film original. Los informes describen consistentemente su pago como un salario directo sin mención de puntos en las ganancias (a diferencia de su contrato para The Sixth Sense, donde ganó más de 100 millones de dólares en total por los beneficios).