Hace cien años, el mundo estaba impulsado por el acero y el petróleo; ahora, el futuro está impulsado por la capacidad de cálculo y la electricidad. El significado del punto de inflexión de 2025 radica en que: la IA reemplaza oficialmente a los motores tradicionales y comienza a determinar la distribución de la cadena de suministro y la asignación de oportunidades laborales.