Hay algunas cosas que, si se dicen demasiado, es mejor que las tengas; de lo contrario, los demás pensarán que las tienes, y si no es así, las cosas se complicarán. Por ejemplo, si dices que eres hijo de alguien, o el hijo legítimo, es mejor que sea cierto; no querrás descubrir al final que tienes 10086 hijos y que tú eres solo uno de ellos, el que, aparte del título de "hijo", no tiene nada más. Es como en este campamento de entrenamiento de @yzilabs, donde todos son "hijos"; al final, ¿cuántos realmente podrán destacar? Puedes echar un vistazo al campamento de entrenamiento anterior. El éxito depende de uno mismo, no del título de "hijo" 😂.