Optimista. La mayor amenaza de la IA no es la superinteligencia ni la obsolescencia humana. Es que la materia sin sentido ahora puede rastrear, correlacionar y automatizar cada fragmento de tus datos, convirtiendo el panóptico en un sistema totalmente autónomo que los estados pueden operar a gran escala. La IA hace que la vigilancia sea barata, total y continua. Las blockchains públicas no pueden luchar contra ello. Zcash es la fuerza contraria. La capa de encriptación para un mundo libre.