Con el pueblo estadounidense saliendo justo ahora del cierre gubernamental más largo y devastador en la historia de EE. UU., no podemos ignorar el arma que los demócratas del Senado utilizaron para tomar al país como rehén. Si la izquierda radical elige nuevamente cerrar el gobierno en enero, los republicanos deberían moverse para poner fin inmediatamente al filibustero legislativo.