Me parece que los inversores que apuestan por la IA enfrentan una elección incómoda: O admiten que están inflando conscientemente una burbuja que estallará como todas las demás, O afirman que la IA está excepcionalmente exenta del ciclo de auge y caída que afectó a los ferrocarriles, internet, etc. ¿Quién ha argumentado bien alguno de los dos casos?