Las redes ya pagan por el cómputo. DeAI paga por la confianza. > Un transcodificador de video elige el nodo con la tasa de fotogramas más estable. > Un pequeño trabajo de ajuste prefiere GPUs que terminan a tiempo. En redes abiertas, las tareas no se dirigen solo por precio, sino por la fiabilidad pasada. La reputación se convierte en capital. No puedes escapar de tu propia historia, especialmente cuando está en rieles inmutables.