Hay una solución sencilla para esto: asegurarte de que tu primer hogar sea tu hogar para siempre. Si no puedes permitirte tu casa para siempre, o no tienes claro dónde quieres echar raíces, alquila Dicen que el punto de equilibrio entre ser propietario y alquilar una casa es de 7 años Eso es discreto.