Opinión polémica: Ninguna cantidad de utilidad de tokens ni recompra de ingresos importará si poseer el token ≠ la propiedad de la empresa. Obliga a fundadores, equipos e inversores en fase inicial a pensárselo dos veces antes de vender, sabiendo que podrían perder el control de su empresa. Creo que esta tendencia tendrá más sentido a medida que las acciones tokenizadas de empresas públicas y privadas se conviertan en una tendencia cada vez mayor en los próximos años. Token = propiedad es la única forma de que las criptomonedas vuelvan a ser tomadas en serio.