🚨🚨🚨 Los republicanos tienen la Cámara, el Senado y la Casa Blanca, pero el estado profundo sigue vivo y coleando con el presidente de la Cámara siendo derrotado por demócratas de la Cámara que intentan bloquear mi disposición para exigir la divulgación del Congreso cuando el FBI abra investigaciones de contrainteligencia sobre candidatos presidenciales y federales que aspiran a cargos públicos. En una audiencia pública en marzo de 2017, mis preguntas al exdirector del FBI James Comey comenzaron a desentrañar el engaño ruso cuando Comey admitió no haber seguido los procedimientos adecuados de notificación con la apertura ilegal de Crossfire Hurricane. Un acto criminal que nunca podrá volver a ocurrir. Mi disposición reforzará esta rendición de cuentas y transparencia para disuadir esta instrumentalización ilegal y fue aprobada por el Comité de Inteligencia de la Cámara en este Congreso y en los anteriores. Sin embargo, los republicanos de la Cámara siguen siendo derrotados por el estado profundo debido a la oposición de Jamie Raskin. Si los republicanos no pueden ofrecer soluciones legislativas y de rendición de cuentas para, posiblemente, el mayor problema de corrupción ilegal y militarización gubernamental de todos los tiempos, ¿qué estamos haciendo entonces? Este lenguaje es aún más esencial a la luz de la continua instrumentalización del gobierno federal, evidenciada por el amplio escándalo de las escuchas telefónicas de la escarcha ártica y las recientes filtraciones ilegales de las conversaciones de Steve Witkoff con homólogos extranjeros. A menos que esta disposición se reincorpore al proyecto de ley para prevenir la instrumentalización política ilegal de la comunidad de inteligencia en nuestras elecciones, soy un NO rotundo. Siempre he votado a favor de los proyectos de ley de autorización de defensa e inteligencia, pero ya no más. Es una vergüenza escandalosa que los republicanos se dejen aplastar por los demócratas y el estado profundo en esto.