Tras el asesinato de Charlie Kirk, el director del FBI, Kash Patel, llegó al aeropuerto de Provo sin chaqueta de redada del FBI y se negó a desembarcar hasta que se la entregaran. A Patel le proporcionaron una chaqueta de redada que pertenecía a una agente especial del FBI, pero protestó porque faltaban parches de Velcro en las mangas superiores. Los miembros del SWAT entonces le dieron a Patel sus parches para apaciguarle. Seguir: @AFpost