Este es mi cuarto año viviendo en Estados Unidos. El Día de Acción de Gracias en Estados Unidos es diferente al de Canadá. Aquí la gente se lo toma mucho más en serio. Al menos en mi ámbito personal o digital. Y es una maravilla. Es un buen recordatorio. Estar agradecido incluso por los "problemas". Dejé ropa de deporte sucia tirada en el suelo: apestosa, mojada de sudor. Mi mujer dijo en tono de broma: "Te agradezco que hagas ejercicio, y es mejor que latas de cerveza. ¡Ahora recógelo!" Encuentro que la gratitud es un sentimiento difícil de apreciar de verdad, más allá de las palabras. Mi tendencia es centrarme en los problemas, reales o percibidos, y en ausencia de ellos, temer el potencial o la inevitabilidad de los mismos. Además, la culpa de que, aunque tengo tanto por lo que estar agradecido, hay otros que están experimentando dificultades que apenas podemos imaginar. Cómo uno puede sentir gratitud sin culpa es una especie de batalla interna para mí. Dicho esto, está el viejo proverbio (que en realidad no es un proverbio): Si tienes problemas con los pagos del coche, agradece el coche. Si tienes el problema o las reparaciones del aire acondicionado, agradece tener un aire acondicionado. Si tienes un tejado con goteras, agradece que lo tienes. Por encima de todo, si tienes tu salud, y la de tus amigos y familia, tienes todo en el mundo por lo que estar agradecido. Todo lo demás es material. Feliz Acción de Gracias.