Podrías haber comprado 68,000 BTC y asignado 250,000 satoshis a cada uno de 27 millones de niños, representando su parte justa del suministro fijo de 21 millones de Bitcoin. Para cuando lleguen a sus 30 años, esa asignación podría valer mucho más que cualquier cantidad de moneda fiduciaria que de otro modo podrían acumular, asumiendo que la moneda fiduciaria mantenga algún valor significativo para entonces.