Por qué la inmigración no soluciona el problema fiscal de las bajas tasas de natalidad Jesús Fernández-Villaverde, profesor de economía en la Universidad de Pensilvania y él mismo inmigrante, explica por qué la inmigración masiva no resuelve el problema de las bajas tasas de natalidad para los presupuestos nacionales. "¿Por qué no simplemente traer más inmigrantes? Estados Unidos tiene un estado de bienestar. Esto significa que aquellos individuos que están por debajo del percentil 60 o así de la distribución de ingresos son receptores netos de fondos del gobierno durante su vida (es decir, el valor presente neto de lo que contribuyen menos lo que reciben más tarde en la vida, como la Seguridad Social y Medicare), aquellos entre el percentil 60 y el 90 son aproximadamente contribuyentes netos cero, y solo en el 10 por ciento superior son contribuyentes netos. En otras palabras, todos los inmigrantes que llegan a Estados Unidos están por debajo del percentil 90 y no ayudarán a resolver los problemas fiscales creados por la baja fertilidad. Los países europeos que tienen las bases de datos detalladas necesarias para calcular estos números con cuidado han encontrado que ni siquiera la segunda generación (es decir, los hijos de inmigrantes nacidos en el país) es un contribuyente neto al estado de bienestar. Necesitamos evaluar la política de inmigración en función de varios factores además de sus implicaciones fiscales. Mi argumento es más modesto: “Si piensas que aumentar el número de inmigrantes de baja y media habilidad resolverá los problemas fiscales a largo plazo que enfrenta Estados Unidos, te equivocas.”" - Jesús Fernández-Villaverde 1/2
Fernández-Villaverde estima que el costo de las bajas tasas de natalidad podría medirse en los cuatrillones de dólares. "Si bien comparto la preocupación por el cambio climático, el verdadero desafío económico de nuestro tiempo es la crisis de la fertilidad." 2/2
34,06K